Sociedad Agropecuaria de Cerro Largo - 80 años de una historia DIGNA

Durante sus primeros 80 años, la Sociedad Agropecuaria de Cerro Largo, ha sido un testigo privilegiado de la realidad productiva, social, y económica del Departamento. Por ella han pasado grandes hombres, en especial aquellos que comprometieron sus capitales para emprender el sueño en los albores de la historia institucional.

En lo personal, nos tocó en la última década, ser el presidente más joven de esa Organización. En dos oportunidades (2003 y 2007), los socios nos otorgaron esa responsabilidad, permitiéndonos concretar junto a un cuerpo directivo activo, algunos cambios importantes, que queremos compartir con nuestros lectores:

1) Revisión, reformulación, y conciliación de Nuevos Estatutos Sociales procesados en Asambleas Extraordinarias, actualizando los mismos a los tiempos actuales.

2) Formulación de la visión y misión institucional. Concurso de un nuevo logo para Local Conventos, y definición de una estrategia de posicionamiento como el Principal Centro de Subastas de la Región.

3) Integración de la mujer, por primera vez en la historia, mujeres integraron la Directiva en las personas de la Sra Maricema Sención y la Dra Isabel Lucas.

4) Concreción y financiación con recursos genuinos de la Obra Local Conventos bajo gradas, y pistas, la obra más grande de los últimos tiempos.

5) Consolidación del Espacio de Iniciativas Locales, integrando a Artesanos a las Expos, en especial a las mujeres y jóvenes rurales.

6) Relanzamiento de le Expo Ovina, y proyección del Local en régimen de Bandera Libre.

7) Innovación de los espacios de comunicación con los socios, boletines informativos, web, etc.

8) Se crearon espacios de articulación y trabajo en red con las Federadas del Departamento, consolidando espacios de capacitación (ITC, Facultad de Agronomía).

9) Se relanzó y proyectó el campo ganadero, generador de ingresos para la Institución.

10) Se consolidó una estrategia económica y de funcionamiento eficiente, eficaz y rentable. 

Pero lo más importante no fueron solo esas transformaciones, sino que perduraron en el tiempo, directivas que año a año se renuevan con productores jóvenes, de la mano de veteranos que dejan y abren espacios a la renovación, con generosidad y grandeza. 

Respeto y cariño institucional que se cultiva, en un ambiente de amistad y compañerismo.

Hoy, trabajando en otras “arenas”, desde ya hace tres años hemos dado un paso al costado respetuoso, negándonos a integrar la directiva, para separar en el tiempo, mi trabajo político partidario actual del trabajo gremial del pasado.

Mucho de lo que aprendí, se lo debo a la Sociedad Agropecuaria, muchas de las amistades que coseché. Hoy como ayer, sigo caminando por la senda del compromiso y la responsabilidad social, trabajando por los intereses de Todos, desde los lugares que la Comunidad me honra en ocupar.